Los niños tienen sus propias maneras de ver, pensar, sentir y expresar
El día a día en el salón del Mico es muy divertido y siempre está lleno de sorpresas, disfruto mucho cuando conjugan los verbos y los tiempos, por ejemplo el otro día estaban conversando dos niños y uno le contaba al otro:
"mañana fui a cine a ver Intensa-mente con mis papás y comimos crispetas"
A lo que respondió el otro niño:
"yo también fui pero no comimos esas cosas blancas sino triángulos (nachos) duros con salsa amarilla".
Otro día en el muñequero, estaban jugando una niña y un niño a la familia: el niño se va a la cocina a preparar la comida, sirve en un plato pan y huevo, lo toma con una mano y en la otra lleva una botella de jugo de naranja que encuentra en la nevera. Se lo lleva a la niña que está en la mesa con un bebé en los brazos. La niña espera que el niño deje todo en la mesa, coge el pan y simula que lo come, luego lo coloca en el plato de nuevo y toma la botella, la mira y le dice al niño:
"El jugo no está abrido"
Estás son solo dos muestras de las muchas cosas que ocurren en Por Un Mañana y en especial en el salón del Mico donde encontramos niños y niñas recursivos, espontáneos, asombrosos, cariñosos, colaboradores, inteligentes, consentidos, entre muchas otras cualidades.
María Fernanda Quintana Truyó
Profesora salón Mico